El certificado energético, obligatorio para vender tu piso
Cuando decides poner a la venta tu piso, la primera duda que surgen es: ¿qué es el certificado energético? Pues bien, el certificado energético es un documento donde queda reflejado el consumo energético y las emisiones de CO2 de tu vivienda. Por ello se convierte en uno de los papeles imprescindibles a la hora de vender o alquilar un piso. Su importancia es tal que si no tienes el certificado energético de tu piso en regla, la venta o el alquiler se considera irregular y te expones a multas que van desde los 300 y a los 6000 euros, según la Ley 8/2013 del 26 de junio.
La calificación obtenida durante la ejecución del certificado energético debe aparecer en el anuncio de venta o alquiler del piso. Así, queda prohibido por ley no mencionar la calificación energética en el anuncio, falsear el resultado del certificado y vender o alquilar el inmueble sin haberlo realizado previamente.
¿Quién debe solicitar el certificado energético?
La obligación de solicitar el certificado energético la tiene el propietario del piso. Así, el dueño de la vivienda tiene que contratar este servicio a un técnico certificador o, en su caso contar con los servicios de una inmobiliaria como ILV que cuente con esta asistencia.
¿Cuánto cuesta el certificado energético?
Realizar el certificado energético de tu vivienda cuesta al rededor de los 200 euros. Si bien es cierto que el precio por la calificación energética puede variar según los metros cuadrados del inmueble. Puedes consultarnos en cualquiera de nuestras oficinas sin compromiso y con el mejor precio.
¿Qué vigencia tiene el certificado energético?
El certificado energético tiene una duración de 10 años y el propietario es el responsable de su renovación, que debe atender a lo que establezca el órgano competente de Bizkaia.
¿Cuándo es obligatorio contar el certificado energético?
Es obligatorio contar con el certificado energético para alquilar o vender una vivienda desde el pasado 1 de junio de 2018. El certificado energético tiene que entregarse al comprador o mostrar al nuevo inquilino. Así mismo, también se necesita la etiqueta energética que deberá emitir la propia Comunidad Autónoma del País Vasco.
La clasificación de etiquetas en el certificado energético
El certificado energético está compuesto por una serie de etiquetas que muestran el consumo anual de energía de un edificio en condiciones normales de ocupación y funcionamiento. Esta certificación incluye la producción de agua caliente, la calefacción, la iluminación, la refrigeración y la ventilación. Este proceso termina con la asignación de la etiqueta energética pertinente.
La clasificación de etiquetas van en la escala de 7 letras. Así, la letra A determina el edificio más eficiente, y por el contrario la letra o clase G, corresponde al edificio menos eficiente. Según esto, la clasificación del certificado energético es la siguiente:
— A, B o C son las etiquetas de pisos que se consideran con gasto bajo o muy bajo. La A corresponde a un gasto energético menor al 55% de la media. La B corresponde a un gasto energético de entre el 55% y el 75%. La C corresponde a un gasto de entre el 75% y el 90%.
— D o E son las que determinan un gasto medio de la vivienda. La D se considera entre el 90% y el 100% de gasto medio. La E se considera entre el 100% y el 110%. La mayoría de inmuebles se encuentran en este punto.
— F y G, son etiquetas de un gasto alto, siendo la F la que obtiene entre el 110% y el 125% de media de gasto, y la G la que supera el 125%.
¿Cuándo se entrega el certificado energético?
El certificado energético se entrega al nuevo propietario, en el caso de la venta del piso, ya que se incluye en el contrato de compra-venta.
Cuando se trata de un alquiler, el arrendador debe enseñárselo a los inquilinos y entregarles una copia del certificado energético.